UNEAC
Hay que
decir que el presidente Obama, `aunque fue valiente, fue mucho más
inteligente, en sus planteamientos del 17D, ante todo, debido a las razones
básicas siguientes:
1.
Haber catalogado como un fracaso la política seguida contra
Cuba en los últimos 55 años y más que ello, que había sido Estados Unidos quien finalmente
resulto aislado con esa política.
2.
A diferencia de lo que había
tenido lugar hasta entonces, Obama
no pedía señales algunas a Cuba
para plantearse cambiar la política.
3.
No planteó tampoco nuevos condicionamientos, ni
mantuvo los ya existentes.
4.
Aceptó negociar con Cuba, tal
y como esta venia planteando: en igualdad de condiciones y respetando la
soberanía e independencia de la Isla. Lo cual es sin dudas un altísimo reto
para la diplomacia acostumbrada de
Estados Unidos.
5.
Tomó la iniciativa de proponer
el cambio de política a Cuba. Y dio los primeros pasos para la negociación.
6.
Invirtió la ruta crítica,
proponiendo primero entablar las
relaciones y después comenzar a negociar. Exactamente a la inversa de cómo había sido
con Carter, durante el periodo 1977-80-
7.
Propuso comenzar de lo simple
a lo complejo en el contenido de las
relaciones.
8.
Tomó los asunto en sus manos, sin cederle su liderazgo
a nadie.
Estos son
asuntos de partida muy importantes, pues ellos de conjunto significan que si
las cosas en el futuro no decursan de ese modo, las negociaciones
podrían frustrarse.
Pero, según
sabemos, hubo 18 meses de negociaciones
previas, que permitieron llegar a ese momento del 17D. Ese día, el Presidente Raúl
Castro, no tenía que decir más que lo que dijo. Su discurso pudo ser breve. No
era Cuba quien debía tomar la iniciativa de
cambiar ninguna política. Tampoco estaba dispuesta a la aceptación de condicionamientos,
ni debía dar señales de ningún tipo. Las condiciones planteadas por parte
de Cuba para negociar eran elementales:
que menos pedir, que si habría negociación esta
tuviera que hacerse en igualdad de condiciones y con el respeto
de su soberanía e independencia. Por eso decimos que Obama fue muy inteligente,
al plantear las cosas como lo hizo el 17D,
pues Cuba no iba a aceptar
ninguna otra alternativa. Lo cual mostro claramente la voluntad política del Presidente Obama de negociar las relaciones con Cuba.
Pero hoy nos
enfrentamos a varios asuntos
importantes, en términos de los detalles de esa negociación que
decursa.
1.
¿Cómo fueron los detalles
acordados para establecer las embajadas, si sabemos que este paso
se retrasó, como resultado de que
hubo que discutir asuntos en los que no se ponían de acuerdo respecto a cómo funcionarían las sedes
diplomáticas? Asuntos que solo han comenzado a parecer a “cuentagotas”, y como “deslizados” en los discursos del Ministro de Relaciones
Exteriores Cubano y el Secretario de Estado Norteamericano. ¿Dónde está el
listado de acuerdos específicos a que se llegó para el funcionamiento de
las embajadas?
2.
¿Dónde está la
información que nos relataría como
fueron esos 18 meses de negociaciones previas que condujeron al 17D?
Del lado de Cuba
no sabemos nada sobre ambos momentos. Al menos el pueblo no lo sabe.
¿Cuándo y quien nos va a informar sobre esos asuntos de tanto interés? Que tan
preocupantes pueden ser para nuestra gente y en particular para nuestra
intelectualidad revolucionaria.
ü Dos amigos en los
Estados Unidos, los
académicos William Leo grande y
Peter Kornbluh, ya han publicado un artículo muy sugerente,
“Diplomacia Ultra Secreta” (Proceso 2024, 16 de agosto del 2015, No.49), en el que pensamos, desde su visión, que no
tiene que ser igual a la nuestra, han plasmado
lo que ocurrió en esos 18 meses.
¿Y nosotros desde Cuba? ¿Cuándo
vamos a dar nuestra visión de esos acontecimientos tan importantes? ¿Les vamos
a dejar a otros, por muy amigos que sean,
que den su visión de un asunto
que también nos pertenece?
ü ¿Cuándo nuestras autoridades van a suministrar a nuestros
especialistas, que los tenemos en Cuba,
la información que necesitan para dar nuestra versión de tales hechos mencionados?
¿O es que
nos vamos a conformar con que sean amigos de fuera, por muy amigos que
sean, los que informen a nuestro País de acontecimientos que no pertenecen
solo a Estados Unidos?
Sin dudas
que “ya estamos perdiendo por no presentación”. O es que no nos hemos percatado
de ello. ¿O es que se trata de un asunto sin importancia que podemos dejar al
peligro de su potencial manipulación?
No quiere
decir que tengamos dudas de estos dos
brillantes intelectuales norteamericanos, ni que dudemos tampoco de la
justeza de su visión. Pero
debiéramos, desde Cuba, tener nuestra
propia valoración de que ocurrió en esos 18 meses y trasmitirla a nuestra
gente. Pues lo cierto es que acerca de
acontecimientos tan importantes, Cuba
siempre debe tener su propia versión. Lo dijo el Cro. Fidel Castro respecto a la “Crisis de Octubre” y
se corrobora ahora con los libros
publicados, “Back Channel”, de los
autores mencionados y “De la Confrontación a los Intentos Negociación: la política de Estados Unidos
Hacia Cuba”, de los autores cubanos Elier Ramirez Cañedo y el que escribe, Esteban Morales Domínguez, presentados ambos libros
en la UNEAC, el 13 de octubre del 2014.
¿Podrían los
compañeros y compañeras que están negociando con Estados Unidos, suministrar a
nuestros especialistas la información
necesaria, para elaborar algo parecido, a lo que han hecho los dos amigos
Académicos norteamericanos?
Sobre todo,
dentro del periodo que comienza, en que debemos librar el “segundo round” de una batalla histórica, como la de las
relaciones con Estados Unidos. Proceso dentro del cual nuestro pueblo deberá
estar oportuna y bien informado. Y por
demás nuestros intelectuales, si como hemos dicho, realmente “la cultura es la
espada y escudo de la nación”. Porque,
nadie se engañe, la batalla que ya tenemos encima, es esencialmente cultural,
ideológica y por demás política, donde la información desempeña una función
vital.
Por demás,
si como sabemos, la política de Obama, sigue
una estrategia dirigida a continuar tratando de explotar asuntos que son
de vital importancia para el futuro de la negociación entre ambos países. ¿Por qué
vamos a dejar de lado asuntos como dar nuestra propia valoración de
todos los hechos que giran alrededor de esa negociación?
Encontrándose
entre los asuntos aun preocupantes los siguientes:
1.
Estados Unidos trata de imponer el ritmo de las negociaciones.
Asimetría que sería intolerable para Cuba.
2.
Continúan apoyando a la llamada disidencia interna. Que
como sabemos no son más que mercenarios
a su servicio.
3.
Desatar la polémica respecto a
las prerrogativas del Presidente frente al bloqueo, de tal modo de que todo quede como
está, hasta que Obama ya no sea el
presidente. Amenazando con “dejárnosla
en la estacada “.
4.
Obama aun no pone en práctica
todas las prerrogativas ejecutivas que
pudieran servir para aliviar a
Cuba los sufrimientos del bloqueo, mientras
el congreso toma una decisión.
5.
La negociación sobre Guantánamo continua estancada y ya
el Secretario Kerry ha declarado que no está en la agenda de la negociación.
6.
La llamada Ley de Ajuste
Cubano no está siendo negociada.
7.
Aun los norteamericanos no
pueden venir a hacer turismo a Cuba.
8.
Aún no ha sido eliminada la
promoción de propaganda negativa sobre Cuba en radio y Tv Martí.
9.
En este año 2015, la propia
administración Obama asigno 30 millones de dólares que no pueden ser utilizados sino para el
trabajo de subversión interna en Cuba.
10. Aun el comercio se
realiza bajo las condiciones que han estado siempre vigentes: sin créditos, sin
barcos cubanos, pagando cash y por adelantado antes de llegar las mercancías
y en categorías limitadas de estas.
11. Aún pesa sobre Cuba, que podrá ocurrir con la política de
Obama si se produce un cambio presidencial
en el 2016.
12. Aún está pendiente como se va a comportar la diplomacia
norteamericana.
13. Aún no están claras las facilidades financieras que permitirián a Cuba hacer avanzar el turismo.
14. Aún pesan sobre Cuba
las limitaciones de no utilización del dólar en sus transacciones comerciales.
15. Aún Obama no ha cejado en su empeño de ver las nuevas relaciones con Cuba solo como un cambio
táctico y en las formas de hacer política.
16. Aún Estados Unidos
insiste en imponer a Cuba su modelo de democracia.
17. Aún existe una extrema derecha que está a la caza de la más mínima oportunidad para
frustrar los avances de Cuba.
18. Aún Estados Unidos dispone de aliados que se han comenzado a
acercar a Cuba actualizando los métodos
de subversión.
Todo ello
nos dice, que el paso dado con el restablecimiento de las Embajadas, aun no significa que podamos
hablar del tránsito hacia el proceso de normalización de las relaciones. Dado
que la actividad diplomática entre
ambos países se tiene que consolidar. Mientras ello no ocurra, estaremos en peligro de retroceder. Y sabemos que en
términos de su diplomacia, Estados Unidos nunca
ha estado dispuesto a negociar con nadie respetando su soberanía y en
igualdad de condiciones. Tal cosa no pueden
esperarla de Estados Unidos ni
sus aliados más allegados.
Todo
eso hace que tengamos que estar bien
informados, oportunamente, con realismo y sin ilusiones, como las que erróneamente se nos trataron de inocular,
con el manejo del discurso reciente de H. Clinton, cuando nos
informaron, solo el “Cuento de la
Caperucita”, mientras que la “oreja peluda del lobo”, no aparecía por ninguna parte. Lo cual no ocurrió en la
prensa de derecha. Pues aquí no podemos
decir que la haya.
La Habana, Agosto
28 del 2015