La Habana, 7
jun (PL) El Capítulo
Cubano del Colegio Americano de Cardiología (ACC, por sus siglas en inglés) fue
creado hoy en el contexto del XXX Congreso Centroamericano y del Caribe de la
especialidad que sesiona en esta capital.
Los
alentamos a que sigan trabajando de manera conjunta con nuestros profesionales,
dijo el presidente del ACC, Michael Valentine, al dejar creada de manera
oficial la sección nacional en el capitalino Palacio de Convenciones.
A ustedes los podemos apoyar en la atención que brindan en este país, expresó el especialista estadounidense en la penúltima jornada de la cita en la que participan unos 700 delegados entre nacionales y extranjeros.
Valentine le dio la bienvenida al máximo representante del comité organizador del evento en la isla, Eduardo Rivas, que liderará el Capítulo Cubano, con 21 miembros en esta etapa inicial.
La presencia dentro del ACC constituye un acicate para nuestro desarrollo científico en cuanto a la posibilidad de tener nueva actualización y fomentar las relaciones con ustedes, nuestros hermanos, dijo Rivas, presidente actual de la Sociedad Cubana de Cardiología (SCC).
Nuevos tiempos tenemos y mejores serán los del futuro. Sin duda alguna, nuestra comunidad cardiológica brindará frutos satisfactorios, no solo para los profesionales, sino también para nuestro pueblo, el de Estados Unidos, y los de América Latina y el mundo, aseveró.
Agradecemos este reconocimiento, y lo compensaremos con nuestra amistad y colaboración, aseguró.
Previo a la ceremonia de nombramiento de Cuba como miembro del Colegio Americano de Cardiología, investigadores de ambos países dialogaron durante la reunión conjunta del ACC y la SCC.
En ese encuentro, fueron objeto de debate temas como el embolismo agudo pulmonar, protección del corazón del atleta, cardiología intervencionista y la cirugía cardíaca.
El Colegio tiene la misión de transformar la atención cardiovascular y mejorar la salud del corazón.
La Organización ofrece acreditación a hospitales e instituciones, proporciona educación médica profesional, difunde la investigación y otorga credenciales a los especialistas que cumplen con las calificaciones más estrictas.
agp/rml
A ustedes los podemos apoyar en la atención que brindan en este país, expresó el especialista estadounidense en la penúltima jornada de la cita en la que participan unos 700 delegados entre nacionales y extranjeros.
Valentine le dio la bienvenida al máximo representante del comité organizador del evento en la isla, Eduardo Rivas, que liderará el Capítulo Cubano, con 21 miembros en esta etapa inicial.
La presencia dentro del ACC constituye un acicate para nuestro desarrollo científico en cuanto a la posibilidad de tener nueva actualización y fomentar las relaciones con ustedes, nuestros hermanos, dijo Rivas, presidente actual de la Sociedad Cubana de Cardiología (SCC).
Nuevos tiempos tenemos y mejores serán los del futuro. Sin duda alguna, nuestra comunidad cardiológica brindará frutos satisfactorios, no solo para los profesionales, sino también para nuestro pueblo, el de Estados Unidos, y los de América Latina y el mundo, aseveró.
Agradecemos este reconocimiento, y lo compensaremos con nuestra amistad y colaboración, aseguró.
Previo a la ceremonia de nombramiento de Cuba como miembro del Colegio Americano de Cardiología, investigadores de ambos países dialogaron durante la reunión conjunta del ACC y la SCC.
En ese encuentro, fueron objeto de debate temas como el embolismo agudo pulmonar, protección del corazón del atleta, cardiología intervencionista y la cirugía cardíaca.
El Colegio tiene la misión de transformar la atención cardiovascular y mejorar la salud del corazón.
La Organización ofrece acreditación a hospitales e instituciones, proporciona educación médica profesional, difunde la investigación y otorga credenciales a los especialistas que cumplen con las calificaciones más estrictas.
agp/rml